Valoración inicial del paciente en una urgencia

Protocolos de exploración

Paramédicos ayudando a conductor en carretera — Foto de Stock

  • Para prestar primeros auxilios a una víctima es esencial saber lo que le ocurre, y así poder actuar en consecuencia.

  • Los protocolos de exploración tienen como objetivo valorar el estado de salud del paciente.

  • Es preciso recordar que prestar socorro al accidentado no es el primer paso de las tareas de primeros auxilios, sino que en realidad constituye la tercera fase en la secuencia de actuación de la conducta PAS (proteger, avisar y socorrer).

  • En primer lugar, hay que garantizar que el entorno en el que se va a actuar sea seguro, tanto para el auxiliador o auxiliadores como para la persona que se va a socorrer, y a continuación avisar a los servicios de emergencia llamando al número 123. Solo entonces es cuando comenzaremos a prestar socorro al accidentado, valorando inicialmente sus lesiones.

Equipo de rescate proporcionando primeros auxilios — Foto de Stock

Consideraciones generales para la valoración inicial

  • El examen ha de ser minucioso, exhaustivo y completo. Para ello, es aconsejable seguir un método de exploración sistemático que no deje sin explorar ninguna zona.

  • Evitaremos realizar manipulaciones innecesarias, ya que podemos agravar las lesiones preexistentes o incluso ocasionar lesiones nuevas. Todo lo que hagamos ha de obedecer a un propósito claro.

  • Evitaremos mantener al paciente descubierto. Solo destaparemos aquellas partes que estemos valorando. Es más, hemos de evitar que el paciente pierda calor cubriéndole con mantas, ropas o cualquier otro elemento del que se disponga.

  • Las circunstancias en las que se produzca la exploración condicionan el método que se debe emplear. En la mayoría de los casos, la valoración se realizará in situ, en el mismo lugar del accidente, evitando mover a la víctima, ya que las movilizaciones se han de llevar a cabo con los recursos humanos y materiales apropiados. Solo se moverá a la víctima cuando el entorno no sea seguro.

  • Actuaremos de forma calmada y sin prisas, intentando transmitir al accidentado confianza y seguridad. Para lograrlo también utilizaremos un tono de voz que no resulte demasiado bajo ni demasiado alto y hablaremos de forma sosegada. Para intentar transmitir tranquilidad no debemos realizar comentarios negativos sobre el estado de salud de las víctimas.

  • Las técnicas de exploración que se deben emplear serán principalmente la observación y la palpación. La inspección visual es muy importante en primeros auxilios y especialmente relevante en la valoración del accidentado.

  • En pacientes conscientes es muy útil realizar preguntas sobre su estado, ya que nos pueden orientar para localizar con mayor rapidez y exactitud las lesiones.

  • En aquellas estructuras corporales por parejas, como los brazos, las piernas, etc., estableceremos una comparación entre ellas para intentar discernir entre la afectación y la normalidad. Por ejemplo, si queremos saber si la mano de una víctima está hinchada, deberemos compararla con la otra mano.

Par de paramédicos examinando mujer — Foto de Stock

Signos y síntomas de urgencia

Para realizar la exploración del paciente hemos de atender a los signos y los síntomas que presenta, y para ello se cuenta con diferentes técnicas de exploración.

  • Signo: es una manifestación objetiva y cuantificable de una patología y, por lo tanto, es perceptible por los sentidos de la persona que realiza la exploración.

  • Síntoma: es una manifestación subjetiva de una patología que es referida por la persona que la experimenta, pero que no resulta perceptible para un observador externo.

Ejemplos

Algunos signos

  • El enrojecimiento de la piel (eritema) es un signo, ya que es algo perceptible por la vista del observador.

  • Un olor característico del aliento de una persona es también un signo, ya que un tercero, el que explora, puede captarlo a través de su sentido del olfato.

  • Un ruido extraño en la respiración de un paciente es un signo, puesto que se percibe a través del oído de la persona que realiza la auscultación.

  • La palpación de un abultamiento en la piel de un paciente también es un signo, al ser posible su tacto.

Algunos síntomas

  • Un ejemplo de síntoma es el dolor, ya que únicamente sabemos que existe porque la persona que lo siente así lo manifiesta. Los sentidos del observador no pueden de forma objetiva captar ese dolor ni cuantificarlo.

  • Otros ejemplos de síntomas son el mareo, las náuseas, la sensación de hormigueo en brazos y piernas, etc.

Paramédico Haciendo Ojo Examinando Ambulancia Coche — Foto de Stock

Última modificación: jueves, 18 de junio de 2020, 18:10