Contexto

Medidas de seguridad y protección

En cualquier situación de urgencia o emergencia es necesario mantener una actitud serena y actuar según un protocolo que se ha demostrado muy eficaz en su resolución: hablamos de la pauta de actuación ante emergencias, más conocida como conducta PAS, acrónimo de las acciones proteger, avisar y socorrer.

1. Proteger

Antes de realizar cualquier actuación, es preciso garantizar un entorno seguro para los auxiliadores, para la víctima (o víctimas) y para terceros. Por ello, tomaremos medidas de autoprotección y de protección de la víctima, de terceros y del entorno, evitando que la situación empeore.

Medidas de autoprotección para prevenir infecciones

– Lavarse las manos o ponerse guantes antes de atender a una víctima. Si no es posible y existe una herida sangrante, pedir la colaboración de la víctima para cubrir la herida o utilizar otros medios de fortuna, como bolsas de plástico limpias (a modo de guantes).

– Procurar no respirar, toser o estornudar sobre las heridas abiertas.

– Vigilar la presencia de cristales, agujas u otros objetos cortantes o punzantes cerca de la víctima, que puedan producirnos cortes o pinchazos.

– Protegerse la boca si se hace reanimación cardiorrespiratoria (“boca a boca”) con una mascarilla desechable o bien realizar en caso de sospecha únicamente el masaje cardíaco.

Medidas conjuntas de autoprotección, protección de la víctima y del entorno

– En quemaduras por un agente químico o exposición a agentes tóxicos (insecticidas, plaguicidas, etc.), la persona que presta los primeros auxilios debe evitar exponerse al producto y a la vez retirar los restos que queden sobre la víctima, lavándola y retirando la ropa manchada.

– En una agresión por arma blanca, debemos asegurarnos de que el agresor ya no está en el escenario del incidente o avisar a las fuerzas de seguridad para que lo anulen.

– En un desmayo en plena calle, debemos señalizar el lugar para evitar atropellos o trasladar a la víctima a un lugar seguro cercano.

– Si son los SEM los primeros en llegar, seguirán los protocolos establecidos para señalizar convenientemente accidentes de tráfico, incendios, derrumbes y sucesos de este tipo. 

– Si el accidente ocupa todos los carriles de una vía (de dos o varios carriles), ya sea total o parcialmente, será preciso cortar toda la carretera para que los intervinientes trabajen con la máxima seguridad.

2. Avisar

Una vez asegurada la zona, conviene poner la situación en conocimiento de los sistemas de emergencias. Para ello, vamos a utilizar el teléfono 123 u otro que sepamos que funcione en la zona. Si el auxiliador no puede realizar la llamada, debe encargarse a otra persona que la realice.

En esta llamada, el alertante deberá proporcionar el mayor número de datos posible.

La información mínima que se debe proporcionar al 123 es:

– Localización exacta de los hechos: si estamos en una población, se dará la dirección completa; si se trata de una carretera, el nombre de la vía, el punto kilométrico y el sentido. Si no conocemos toda la información, tomaremos puntos de referencia visual (una iglesia, una montaña, una torre de alta tensión, un viaducto, etc.).

– Personas involucradas y estado en el que se encuentran: ilesos, heridos, inconscientes, etc.; es importante informar de si hay disminuidos psíquicos o físicos, niños o mujeres embarazadas.

– Gravedad de la emergencia: si se trata de un accidente de tráfico con varios vehículos implicados y heridos, o de una persona que ha sufrido quemaduras de segundo grado haciendo la comida, si se trata del incendio de un edificio de apartamentos, etc.

– Riesgos asociados: incendios, puentes destruidos, terremoto, líquidos o gases inflamables o tóxicos, líneas eléctricas dañadas, vehículos que obstaculizan la calzada, etc. El alertante debe esperar a que el operador del NUSE le comunique que tiene todos los datos y que puede colgar el teléfono.

3. Socorrer

Esta etapa consiste en atender a la persona o personas accidentadas. Lo primero que haremos será comunicar a la víctima que la ayuda está en camino. Es muy importante transmitir sensación de tranquilidad a la víctima y reconfortarla, aunque esta no responda. En ningún caso la moveremos, a no ser que corra peligro. Aplicaremos nuestros conocimientos para procurar que su situación mejore, o al menos no empeore, hasta la llegada de los servicios de emergencia.

A continuación, haremos lectura del video de apoyo a la clase, tendremos en cuenta las ideas principales para socializarlas en el próximo encuentro remoto.

Última modificación: martes, 26 de mayo de 2020, 13:46